Los Sij y su Templo Dorado (4-5/12/2010)   9 comments

Tras deambular unas semanas por Asia Central, el 4 de diciembre tomamos el segundo avión de nuestro viaje, conectando Tashkent con la ciudad india de Amritsar. Nuestra intención siempre ha sido la de hacer el mayor número de kilómetros posibles por tierra pero, teniendo en cuenta los países que pillaban por medio (Afganistán y Pakistán, básicamente), decidimos sobrevolarlos y dejarnos de historias.

¡Por fin llegamos a India! ¡Qué contraste entre el hastío y la brumosa tristeza de Uzbekistán con el vibrante olor a vida que se respira en la India a todas horas! Por no hablar de la comida… Hummm…… Todos esas salsas pringosas, especias, currys, butter naans, dhals de legumbres, platos al tandoori, chicken ticka, salsa masala…

Todos los males estomacales del pasado se esfumaron de golpe para no volver. ¿Qué raro, verdad? Además, quizá porque predominaba el vegetarianismo, salimos del país con menos panza que la que teníamos al entrar. Todo ventajas.

Y no llegamos a una ciudad cualquiera, no. Para darle un toque diferente al viaje (y porque era más barato que volar directos a Delhi, para qué engañarnos), aterrizamos en Amritsar, la ciudad sagrada de los Sij.

El sijismo es una religión profesada por alrededor de 23 millones de personas, que combina el modelo monoteísta islámico con algunas tradiciones hinduistas. Es originaria de la región india de Punjab, justo al lado de la frontera con la islámica Pakistán (de ahí la mezcla rara entre monoteísmo e hinduismo), siendo Amritsar para ellos lo que La Meca para los musulmanes o El Vaticano para los católicos. Y si en La Meca tienen la Kaaba y en El Vaticano, San Pedro, en Amritsar está el magnífico Templo Dorado de los Sij, donde además éstos son mayoría entre los demás indios.

Gracias a la súper-guía proporcionada por nuestros compadres argentinos (¡esos Juan y Daniela!), nos enteramos de que se podía dormir por un muy módico precio dentro del mismísimo Templo. Íbamos a tener que compartir alojamiento con cientos y cientos de peregrinos, pero la pela es la pela, así que allí que nos fuimos.

Este es el módico precio que nos pidieron:

Y ésta es la “habitación” en la que dormimos la primera noche.

La segunda noche estuvimos un poco más espabilados y, en cuanto se quedó libre, nos hicimos fuertes en este cuartucho tan acogedor. Utilizamos la vieja y efectiva técnica del desparrame indiscriminado de pertenencias por doquier, de la que somos unos maestros, haya o no que hacerse fuerte en algún lugar.

La entrada de nuestro hotel estaba custodiada 24 / 7 por el tipo que descansa en la puerta. Atención al arma reglamentaria que nos lleva. ¡UNA xxxxxx LANZA! Pues todos los vigilantes así, dentro y fuera del Templo. Parecía la guardia pretoriana del Capitán Nemo.

Justo enfrente de nuestra guarida temporal teníamos el famoso Templo Dorado. No dejaban meter la réflex dentro del recinto, así que vamos a tener que conformarnos con una foto desde lejos (aunque siempre nos quedará la Wikipedia, claro).

En cuanto a los Sij, sabemos que está mal generalizar y recurrir a tópicos. Sin embargo, y sin que sirva de precedente, en este caso las generalizaciones son positivas. A nosotros nos pareció que los Sij tienen un aire noble y calmado muy característico. Si la India es un caos, los Sij son su contrapunto de temple y seriedad. Por lo menos ésa es la impresión que nos dieron a nosotros. Suponemos que el que nos dejaran dormir by the face en su Templo Sagrado ayudó en nuestras apreciaciones.

Si al rollo de nobleza y templanza le sumamos que llevan siempre una daga, una pulsera extraña, una barba molona y un turbante que no se quitan ni para dormir, lo tenemos claro: ¿Algún Sij por ahí que quiera ser nuestro nuevo muy mejor amigo? Prometemos no pediros la daga para pelar naranjas ni daros el coñazo con el turbante cuando estemos por ahí de fiesta…

A continuación, galería de tipos Sij (las tipas no molan tanto, por fuera son exactamente iguales a las demás indias de la India):

Éste nos llevó en a los dos en un rickshaw a pedales. A pesar de haber acordado un precio antes de subirnos, a medio camino se lo pensó mejor y nos pidió más pasta. No se la dimos, claro, y el hombre se mosqueó un poco:

Estos dos debían ser Sijs V.I.P. Observad si no la pedazo de espada que gastan los angelitos (por lo visto, el color azul del turbante revela la clase social del que lo lleva. En este caso es de las más altas, lo que les permite tener espadas gigantes como éstas. Parece ser que hasta les está permitido meterlas como equipaje de mano en vuelos dentro de la India. Tanto lanzas como espadas y dagas. Verídico. 🙂

Fijaos en que los turbantes son de distinto color:

Esta foto no viene a cuento porque no tiene nada que ver con los Sij, pero a nosotros nos gusta. Es Hanuman, el Dios-Mono de los hindúes. Andaba por ahí en un templo cualquiera:

Así, tras un par de intensos días descubriendo Amritsar, pusimos rumbo a Delhi en un maravilloso tren del infierno, nuestro medio de transporte favorito en India. Uan recomendación, si vais 8 horas en tren diurno, no cojáis el billete más barato. Cucarachas va a haber hasta en primera, pero por lo menos dispondréis de más espacio que compartir con ellas…

Próximamente, de visita en Delhi con cama decente y copeo, que ya tocaba.

Publicado 12 enero, 2011 por encualquierotraparte en India

9 Respuestas a “Los Sij y su Templo Dorado (4-5/12/2010)

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  1. Voy sonriendo como una tonta en el bus al curro…soy fan de los sijs!! Nosotras tuvimos un «chofer» sij y era un buenazo!!ahora si, callado como una tumba…q buenos recuerdos, bueno salvo q me habéis recordado el viaje mas cerdo de tren q he vivido y nocturno!!agarradas al macuto para no ser robadas…besos!!!

  2. Hola. Cada vez me voy convirtiendo en mas adicto a vuestro periplo y a los comentarios y fotos que plantais….a la par que crece la envidia gorrina.
    Hasta pronto

  3. Queridos viajerso,

    Si me permitís la licencia, diré que bajo mi punto de vista las mujeres sijs son bastante más sosas en su indumentaria que el resto.

    Por lo demás, coincido y comparto vuestras opiniones, aunque no sé si habéis visto el hilillo de pelo kilométrico que les queda a los hombres después de décadas de sometimiento al turbante; el resultado es bastante asqueroso.

    Se nota que estáis encantados con esta parte del mundo por la manera en la que escribís.

    Nos vemos pronto y preparaos porque os voy a dar mucho la brasa con mi bahasa improvisado.

    BESAZOS

    Marta

  4. La verdad es que mis mañanas en el trabajo se hacen mucho menos duras leyendo vuestras aventuras… Eso sí, estoy deseando que llegue ya el post de Delhi y poder recordar grandes momentos en el Bukhara o aprendiendo hindi con Rafa en el metro 😉 Besos

  5. Que bueno la India chicos! Viva los Sijs! Abrazo!

  6. ¡Fantástico, chicos! ¡Que interesante lo que nos contáis y que nos contéis! La verdad es que nos dejais con los dientes hasta el suelo de envidia, pero bueno, vamos viajando con vosotros, aunque solo sea en plan virtual.
    ¿Siguen con vosotros vuestras personal belongings? Después de ver los tugurios cinco estrellas donde os alojáis, con sus cajas de seguridad bien protegidas…
    Que la paz sij vaya con vosotros. Seguid descubriendo el mundo y alimentando la curiosidad de vuestro club de fan.
    Besazos

  7. Chicos, el tipo del rickshaw que os intentó timar no es sij!! fijáos atentamente en su cara… NO LLEVA BARBA!!!! tiene más cara de típico timador de turistas de Rajastán 🙂 Confirmo vuestras apreciaciones, LOS SIJS MOLAN!! y eso que no habéis contado que no sólo te dan cama en su Templo, sino que dan de comer gratis a todo el que quiere (sea de la religión que sea y de la casta que sea!!)

    Qué ganas de la próxima entrada 🙂

  8. ¡Lo que estamos aprendiendo con vosotros! Pero creo que el buen rollito que os dan los sijs tiene que ver en tu caso, Álvaro, con un poquitín de morriña. Fíjate en el de la foto de los cuatro en un rickshaw: el del centro es igualito que tu papá (Hola, J.M., ¡no te enfades!)
    Besos gordos desde Madrid

  9. Hola chicos llevaba varios dias sin saber de vuestras andanzas y hoy que he tenido tiempo me he metido .Que envidia sana me dais pero gracias a vosotros estoy conociendo paises que jamas podria ir ,espero la proxima entrega de Delhi cuidaros besos

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